Mathilde
La primavera es la temporada ideal para sesiones fotográficas exteriores. La naturaleza renace, los colores explotan, la luz se vuelve más suave. He aquí cómo aprovechar al máximo esta temporada mágica.
La primavera ofrece una luz particular, más dulce que el verano pero más cálida que el invierno. Privilegiad el final de la tarde cuando el sol está más bajo, o las mañanas cuando el rocío aún brilla en las flores.
- Campos de flores (colza, girasoles jóvenes) - Huertos en flor (cerezos, manzanos) - Parques y jardines botánicos - Bordes de río con sauces - Prados con flores silvestres
- Utilizad la apertura amplia (f/1.8-f/2.8) para fondos borrosos - Jugad con la luz natural filtrada por las hojas - Incorporad elementos florales en primer plano - Capturad los detalles: gotas de agua, pétalos, brotes
- Caminar en el prado tomados de la mano - Sentarse entre flores - Oler flores (especialmente niños) - Lanzar pétalos al aire - Picnic en la hierba
Aconsejad colores pastel o tonos naturales que se armonizan con el entorno primaveral. Evitad colores demasiado vivos que compiten con las flores.
Tras la sesión, entregad vuestras fotos primaverales con Pelli en una galería que refleje la frescura de la temporada.